17 octubre 2006

Incipiente, reluciente e divertente

Mucha gente necesita un pequeño empujón para dar rienda suelta a su creatividad. Los que somos medianamente humildes y no vamos de "sobraos" por la vida, acostumbramos a pensar que a nadie le interesa lo que tenemos que decir o que ofrecer. Empezar a escribir un blog me ayudó a darme cuenta de que tu opinión a veces puede contar. Los pensamientos que plasmas en tu bitácora pueden llegar a irritar a algunos, pueden divertir a otros y, por qué no, pueden ayudar a otros tantos. Si te lo pide el cuerpo, y tienes algo de tiempo y ganas (que no siempre se tienen las dos cosas), no hay motivo para no empezar tu propio blog.


Eso es lo que ha debido pensar nuestro compañero Joaquín para estrenarse con su blog El Incipiente. Un blog que promete y al que habrá que estar muy atentos en el futuro. Puede que su nivel de friquismo no llegue al de otros que hemos mencionado previamente, pero los contenidos no son nada desdeñables. Si no me creéis, os remito al mejor post hasta la fecha en El Incipiente. Un gran estreno, sin duda.


Sin embargo, no son chicas de buen ver lo único que podéis esperar de este blog: confío en que alguna teoría sobre LOST también caerá. Con un poco de suerte nos deleitaremos con truquillos sorprendentes de nuestro ordenador o nuestra instalación de red, y sospecho que el tema de los coches y los cafres al volante seguirá estando presente. En cualquier caso, es mejor que sea el autor el que nos desvele lo que está por venir. Enhorabuena por la inauguración, quedas coronado tercer miembro de la red FriquiMurcia y esperamos ansiosos tus delir... errr, novedades ;-).


Tags Technorati: , , ,

1 comentario:

Joaquin dijo...

Gracias, gracias por la dedicatoria y la estupenda presentación. Creo que no la merezco, pero en fin, la verdad es que tienes razón (en su mayor parte).

A ver si poco a poco nos vamos enmarañando juntos y conformamos una red de pensamiento heterogéneo que nos ayude a ver la cosas desde la perspectiva del otro y así nos ayude a crecer como personas humanas que somos.

O lo que sea.