Shangri-La se describe como un lugar de paz en la cordillera del Himalaya, donde el tiempo se detiene. (No es mío, es de la
Wikipedia)
También es uno de los últimos discos de
Mark Knopfler, aunque no uno de los mejores.
Pero la última acepción se refiere a una dieta de reciente aparición, ideada por Seth Roberts, que si funciona, va a ser una verdadera revolución.
Calorielab analiza la dieta y le da bastante credibilidad. Como no he encontrado referencias en castellano, voy a resumir lo que hay que hacer.
En realidad no se trata de una dieta. Se trata de un truco psicológico para que tu cerebro rompa la asociación entre comida y energía. El principio básico es que si tu cuerpo recibe calorías sin ningún sabor, no podrá asociarlas a un origen concreto, y poco a poco, romperá esa asociación y dejará de reclamar comida cada vez que necesite energía, recurriendo a otras fuentes (como las reservas del cuerpo).
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Para obtener esas calorías, la receta consiste en tomar 3 cucharadas soperas de aceite de oliva extra ligero, o en su lugar, agua azucarada (con 3 cucharadas soperas de azucar en un litro). La ingestión debe realizarse en un espacio entre comidas, al menos una hora después de una comida y una hora antes de otra. Es decir, en la hora anterior y posterior no se puede probar nada que tenga sabor, o el cuerpo asociará ese sabor a la energía.
Como en España no hay ese tipo de aceite extra ligero, supongo que se puede sustituir por aceite de semillas o de girasol refinado. La idea es que no tenga sabor, pero aporte calorías. Si hay algun dietista/nutricionista entre la audiencia, igual puede decirnos algo.
Eso es todo. Por lo demás, se supone que hay que seguir comiendo igual, pero que el cada vez se tiene menos gana de comer, y el cuerpo quema sus grasas. Solo hay que buscar un hueco de dos horas entre dos comidas, lo cual será fácil para la mayoría de la gente.
La blogosfera echa humo sobre el tema. El autor de la dieta conoce y utiliza los blogs para difundir su libro (ha regalado copias a muchos bloggers antes de la publicación para que hablen sobre el libro), y las opiniones son, en general, bastante positivas. Hay gente que afirma que olvida las comidas.
Aunque estas cosas siempre hay que ponerlas en cuarentena, no se pierde nada por probar. El principio es muy simple. Lo único que puede pasar es que no funcione y se cojan unos gramos por el azucar o el aceite. Pero vamos, yo empecé anoche. Ya os contaré... o ya me contaréis, cuando me veáis por la calle X'D